lunes, 30 de marzo de 2015

Todo es lo que parece

Todo es una gran confusión mezclada en un frasco de mermelada de frutilla, de origen francés, olvidado en este viejo placard que se encuentra en el salón todo empapelado de azul contiguo y sombrío, donde las sombras tienen vida y no están para saludarnos cordialmente, sino que todo lo contrario, sino que cuchillos y ruidos metálicos yendo y viniendo por una gran pista de carreras, en la que somos el copiloto pero no logramos avanzar porque el piloto tiene la culpa y sábes que vas a estrellarte, sábes que vas a estrellarte maldito chimpancé con alas y mucho y salado queso como las plantas de mis pies y los oídos de aquel jardinero que sabe bien que su trabajo no estuvo hecho con amor, y el pasto lo dice con solo mirarlo.

sábado, 21 de marzo de 2015

Succionaré tu alma de pecas en pequeños trozos de manzana

Todo sucedió tan rápidamente que no tuve tiempo de contener la respiración para darme cuenta de lo que estaba sucediendo a mi alrededor, hubiera querido manifestar físicamente algo que hiciera que todo lo que me rodeaba se rompa como un espejo en mil pedazos, para que alguien me diga que voy a tener mala suerte y desafiarlo a un duelo de muerte sin resurrección, donde son unos cuantos pasos y darse vuelta cada uno con su pistola para acertar con el tiro porque sino es tu propia vida la que está en juego aquí en el lejano oeste, mientras juegas a piedra, papel o tijera y estás convencido de que vas a ganar porque no crees en la suerte y crees en las posibilidades, y haz estudiado el juego miles de veces, haz hablado con pitonisas que han confiado en ti con palabras de humo desde la cama para resbalar juntos en el tobogán que nos une a mil laberintos de mil callejuelas iguales, porque son esas pecas las que invitan a imaginarse un mundo de estrellas en tu rostro cara de manzana con finas pestañas pata de araña, como alfajores de maicena que después de fumar piden rápidamente desde un kiosko ser comprados, o cigarrillos, porque ésto sigue, que la suerte está de nuestro lado porque ya somos brujos, somos magos y los hechizos son nuestra sangre, pero no sin antes tratar de aspirar tu alma, para que se quede aquí en forma de pequeños trozos de frutas jugosas y silvestres, un rato más junto a mí después de que te vayas, porque agárras la bici y te marchas pero el alma sigue aquí en mi boca respirando como un gran corazón de un mar uruguayo que pide a latidos que lo abracen y nunca lo descuiden, para ser una manzana, para ser un alfajor de maicena, para ser una bruja o simplemente para contarme una historia sobre palomas o charlas entre mates que voy a escuchar y escuchar para seguir nadando entre mares de pecas y un amor de primavera, o de otoño porque justo se va el verano y refresca y no me hágas así que me da frío, vayamos para allá que está el sol, dale, levantáme que no tengo ganas de hacer fuerza, porque por aquí anda dando vueltas un amor de otoño, él lo sabe bien, porque en la Perla de Once compuso la balsa y nosotros nos estuvimos allí pero claro que lo hubiéramos deseado entre duelos de armas del lejano oeste y piedras, papel o tijera, !Maldito Jhonny!

martes, 17 de marzo de 2015

Cómo comprar un nuevo par de ojotas

Y bueno, le vamos a dar una sequita más para sentirse a gusto flotando entre las infinitas telas de la imaginación, visualice con claridad la diferencia entre flotar en telas de seda y telas de araña, ya que será importante para después.
 Antes de que vayamos a morder a otros perros y ellos nos devuelvan la mordida, hasta que se nos rompan las ojotas en medio de la frenética lucha animal y tendremos que visitar un mundo paralelo para comprar algo baratito y que los pies respiren ya que todavía es verano, porque, como decía, para entrar a ese mundo paralelo tendremos que mirar al cielo totalmente azul sostenidos de la mano de alguien a quien apreciemos considerablemente, repetir dos veces el santo y seña que claro que es: "ríos continúen fluyendo sin fin, delfines hermosos delfines, finas piedras hay en Zambia, cuidémonos y cuida de tus hermanos y hermanas, con alarmas sonando estrepitosamente en coches viejos y despintados".
 Entonces al ingresar a la tienda de ojotas del mundo paralelo, donde buscamos nuestro futuro nuevo par de ojotas ya que las viejas se vieron destrozadas en poder de la enorme mandíbula de ese Boxer loco del que ya nos vengaremos, o en vez de ojotas tal vez vendrían bien unas sandalias tipo "romano", o unas Adidas re chetas, en donde la decoración de la tienda está protagonizada por enormes árboles de navidad con sus lucecitas brillando intermitentemente y su música de tin-tin y tan-tan todo tan agudo que rompe algunas telarañas en el oído, despertando así a la enorme araña reprimida que llevamos dentro, comenzando a momificar a todo el personal bajo el efecto sedante de nuestras telas originadas por nuestros filosos colmillos, nuestra increíble bola peluda de patas y baba y enormes y gruesos pelos saliendo desde todas nuestras extremidades.
 Es ahí, cuando físicamente en modo araña, pero ahora después de haberse divertido salvajemente momificando a los empleados de la fábrica de zapatos, y mordido a los perros en la plaza del otro mundo paralelo, nos embanderamos con conciencia, moral y ética y entramos así al mundo de las ideas, y la primer idea es: "comprar nuevo calzado" y es así como tan araña-humado procederemos sin morder ni momificar a nadie, solamente caminando cautelosamente hacia el stand donde se encuentra la mercadería y señalando con algún dedo de nuestra mano derecha humana las lindas "hawaianas" blancas que queremos, mientras sentimos como la araña abandona nuestra identidad lenta, misteriosa y melancólicamente y se aloja en una articula importante del corazón.

sábado, 14 de marzo de 2015

Tú, sorbes las aguas del tiempo

Es ese cansancio que viene después de excederse con la comida y la cerveza, los ojos caídos, pesados y ni siquiera importa que sea sábado a la noche, hay aire acondicionado en la habitación y eso ayuda a regular la temperatura corporal, afectada por el exceso de comida y la cerveza que devinieron en este cansansio, el consumo de marihuana de paupérrima calidad influye, claro está, pero en estos días de retorno a la ciudad se siente necesaria. Últimamente ando un poco obsesionado con la idea del tiempo, y en la marihuana, aunque sea de paupérrima calidad, encuentro algunas respuestas a todo esto que me pasa con el tiempo, y más precisamente es la música quien me brinda estas respuestas, así es como la música y el tiempo parecen ser lo mismo, la existencia en su totalidad se reduce al goce auditivo y al trance energético que una batería, un bajo y una guitarra suelen provocarme, hoy fueron Pappo y los Rolling Stones.
 ¿Cómo seguir? Por lo pronto voy a ir a buscar el quinto vaso de soda con hielo de la noche, la picada me dio ganas de tomarme un río entero con todos sus peces y algas, con todo ese mundo acuático que tiene su propia música y por lo tanto también su propio tiempo, será cuestión entonces de levantarse bien temprano el domingo y averiguar qué hay que hacer para ser de esos que se ponen un traje con casco y patas de rana, y se sumerguen siendo parte de ese otro mundo temporal, ese mundo en el que la picada, la cerveza, la marihuana y Pappo no existen ni existirán, a menos que comience a beber lentamente, con un sorbete, al río, y toda esa agua entrando en mí, junto con los peces y las algas, ahora serán mi mundo, y en mi mundo todo se volverá conocido y tal vez el tiempo se enoje por provocar esta unificación de cosas distintas, aunque mi cuerpo, este envase que a veces camina y otras juega a la pelota, no resistirá los embates de la unificación espacio-temporal y terminaré explotando en algún lago cercano, mientras más cercano mejor, o mientras más lejano, tal vez, sea mejor para vos, que tenés ganas de agarrar un sorbete y comenzar a beber del lago en el que ahora estoy desparramado y esperando ser bebido para reencarnar en otro envase, y así seguir viviendo otro día más, otro sabado más, para preguntarse cómo seguir y pensar en enormes ríos, sorbetes y sobre todo, en el tiempo.

viernes, 13 de marzo de 2015

Un trabajo con guante de seda.

El logró entender todo, y todos los que estábamos ahí entendimos que saboreó todo lo que nos rodeaba con su fino guante de seda, con ese guante que nacío ahí mismo, en donde nuestros sentidos se vieron las caras no por primera vez, y todo fue como un gran puré de manzana verde, todo fue como la primer bocanada de aire que recibimos al amanecer que nos enchufa y nos da pilas y energía, para poder silbar, chiflar y canturrear todo el día como unos locos que solo merodean los pasillos en busca de más y más manzanas con las que ensuciar este maravilloso guantesillo blanco de seda para poder disfrutar de más puré de manzanas. Porque trabajar en un lugar así no es fácil, aunque tal vez si sea fácil pero un poco aburrido, la tarea no es compleja, ir a la cocina, buscar los ingredientes y cocinar, sé que para quien gusta de cocinar mi descripción de lo que sería preparar un puré de manzanas es funesta, ordinaria y hasta una falta de respeto, pero aquí en el viejo acilo de anciano de Pensylvania todo se hace como debe hacerse porque sino a la calle, y en la calle nadie que conozca sabe que pueda llegar a sucederme, aunque Tony me repita siempre la misma historia día tras día y eso probablemente sea vivir en la calle.
 Aquí en el acilo hay que llevarle a Marta el desayuno a las nueve en punto porque sino estás jodido, y nada que la vieja te agarre jugueteando con el fino guante de seda porque enseguida llama al señor McKeyn y empiezan a sospechar que uno no hace bien su trabajo, que los ancianos te prestan demasiada atención cuando te despachas con tu filosofía y lo que dices no gusta nada a los buenos familiares que pagan cada vez más mes a mes, y los ancianos ahí es cuando parecen entenderlo todo y todos saborean lo que nos rodea con el fino guante de seda otra vez, todos entendieron y reclaman luego de haber visto la película que les preparé especialmente para que vean a la hora del té, con las facturas que compré y todos relamiéndose, a la espera de que llegue el familiar, mirarlo atentamente, y todo siguiendo el plan, el maravilloso plan que ideé todos estos años trabajando en este sucio y lúgubre lugar para un viejo hijo de puta como lo es McKeyn, ahora los familiares podran ver mi cara de éxtasis en el momento exacto que vean a sus abuelitos abalanzárse cruelmente y todo el plan confluyendo como exactamente estaba planeado, sin olvidarse de las ideas de mi querida Marta y su actuación sobresaliente para no alarmar a McKeyn haciéndole creer que todo esto no era más que la simple paranoia de un empleado triste y algo siniestro, y todo para conseguir un aumento.

martes, 10 de marzo de 2015

Las ramas del mono travieso

Te digo que sos un careta, pero, ¿Por qué él me dice que soy un careta? Será porque no tengo ganas de ir hasta donde el tranza nos citó para girarnos el fasito, será que tal vez tengo un poco de miedo de que aparezca la policía y que de un momento para el otro todos a la comisaría, así que yo me quedo acá, además ya estoy re loco y no tengo ganas de levantarme para ir a pegar y comprar otra cerveza, si querés te doy la plata, no tengo muchas ganas de laburar últimamente así que lo que junté acomodando autos te lo doy para que compres esa Stella negra que sabés que nos encanta, sabés que hace 35° grados y te la querés tomar toda helada aunque en el súper te la vendan un poco tibia, y otra vez aunque sea martes es irse por las ramas, es subirse al árbol que siempre estuvo observándonos y trepar hacia sus brazos más largos y misteriosos, querer saltar hacia el tronco que se encuentra a unos metros y no animarse y desear con todo las ganas querer ser un mono araña, ¿Te conté que en Cochabamba vinieron unos justo el día que no podíamos entrar a la reserva, no? Creo habértelo contado, y si no fue así, hace como si fuera la primera vez que estoy contando esto, como también es la primera vez que nos preguntamos si vimos el partido, si vimos ese golazo de media cancha, si pensamos que fue para roja o no fue para tanto, si los bosteros están agrandados o de verdad van a salir campeones, todo esto dentro de un gran Naranjú de naranja hace algunos años atrás, cuando después de jugar a la pelota era todo lo que queríamos y tan solo $0,15 centavos, tan solo un alfajor jorgito por $0,50, ¿Y las figus? ¿Te acordas lo barata que salían las figus? Y si no te acordas tomá mate, o un tereré, o vayamos a comprar una birra aunque tenga que levantarme del pasto y tenga algo de miedo al tranza y a la comisaría después.

miércoles, 4 de marzo de 2015

Semáforo entre mariscos y marzo

No me gusta que me veas cuando estoy confundiendo el color del semáforo, es tan normal para mí estar manejando y que el rojo sea verde y el verde sea rojo solo para chocar contra todos y que todo vuele en mil pedazos a la mierda con el fuego y después los bomberos, así que por favor te pido que cuando estoy imaginando estas secuencias en lo más profundo de mis deseos catastróficos no me mires a los ojos, no quieras que escuchemos esa canción tierna y dulce del señor flaco, porque ahora quiero sangre, ahora estoy cansado de tanta lechuga con tomate y quiero llenarme de grasa ya sea pollo o vaca o conejo o lo que sea pero dame carne, que se sienta como se cocina a la plancha con ese olorcito tan particular y tan desagradable que hace que todo se torne rico y despiadado, jugoso y asqueroso, porque si es como hablamos hace un rato, de que la vida es simplemente luz y oscuridad, alegría y tristeza, no difiere mucho del churrasco que se está cocinando ahora en la plancha que a veces sirve para planchar la ropa aunque me gusten las camisas sin planchar y prefiera comer mariscos en la playa cuando tendría que estar trabajando porque es marzo, y cuando es marzo tenemos que trabajar, porque así es la ciudad, así es el ritmo, así son las bocinas, y estoy harto de los refinamientos, de lo limpio, de los lugares comunes, de las palabras que se repiten una y otra vez y ya sabemos que es lo que viene, siempre lo supimos y no es momento de mirar para otro lado, es momento de pisar el acelerador ahora más fuerte que nunca cuando está en verde y llevarse todo puesto bien a la mierda, el poste de luz, aquella dulce señora que acaba de hacer las compras, los chinos, los bolivianos, los coreanos y esas nuevas computadores que salen tan caras pero hay que comprarlas para ser feliz aunque la felicidad sea estar a orillas del río escuchándolo y comiendo mariscos, simplemente comiendo y escuchando y una cerveza para no sentirme tan mal por haber pisado a esa dulce anciana.